Lungo: 15 años de luz, forma y legado
Hace quince años nació una luminaria que transformó el panorama del diseño lumínico en México. Lungo no fue solo un objeto técnico ni una pieza decorativa: fue el inicio de una nueva manera de concebir la iluminación como escultura suspendida, como gesto artístico en el espacio.
En un contexto dominado por soluciones funcionales y previsibles, Lungo irrumpió con una presencia radical: una línea de luz continua, pura, contenida en un cuerpo esbelto de proporciones exactas. Su elegancia formal y su capacidad de suspenderse con levedad absoluta la convirtieron rápidamente en un nuevo clásico, adoptado por arquitectos, diseñadores y coleccionistas que buscaban algo más que una fuente de luz: buscaban una obra.
Durante estos 15 años, Lungo ha habitado hogares, galerías, espacios religiosos, culturales y comerciales, adaptándose a múltiples escalas sin perder su carácter. Su presencia es silenciosa pero contundente, siempre aportando ritmo, dirección y profundidad desde el vacío.
Este aniversario no solo celebra la permanencia de un diseño: honra una visión. La de entender la luz como materia, como línea escultórica que dibuja el espacio. Lungo abrió el camino para una nueva generación de luminarias mexicanas que apuestan por la autoría, la sencillez y la identidad.
Hoy, quince años después, seguimos viéndola flotar con la misma claridad con la que nació. Porque hay diseños que no envejecen: evolucionan. Y Lungo es uno de ellos.
Te compartimos este archivo fotográfico de nuestros clientes que documenta los 15 años de éxito de está increíble luminaria.

























